Derrota cruel en Lorca tras perdonar numerosas ocasiones
No hay manera. El fútbol no está siendo nada justo con la Deportiva Minera. El cuadro del Llano del Beal cae de manera dolorosa en su visita al Lorca Deportiva. El 2-1 final, con un gol encajado en los últimos compases de partido, no refleja el desarrollo del encuentro, con una Minera perdonando en varias ocasiones a los locales.
El choque tuvo dos partes muy diferenciadas. La primera fue igualada, sin demasiadas ocasiones, como una partida de ajedrez que quedaba en tablas. Mientras que la segunda se podría calificar como todo lo opuesto a ese primer acto sin demasiada vistosidad en el juego.
La alta intensidad, con continuas disputas en el centro del campo, marcó un primer tiempo que no tuvo muchas ocasiones. No obstante, los pocos acercamientos con algo de peligro los puso el conjunto visitante. Las internadas de Kike Carrasco y los intentos desde lejos de Roberto Alarcón y Omar Perdomo pudieron causar un disgusto a los locales, que aguantaron bien esas embestidas del equipo dirigido por Checa.
El 0-0 al descanso sí que reflejaba lo que habían sido los primeros cuarenta y cinco minutos. Dos equipos con mucha garra, pero sin demasiado acierto para hilvanar acciones de peligro en el último tercio de juego.
Radicalmente distinta fue la segunda mitad, que ya desde el principio vislumbraba que iba a ser entretenida. Vaya que si lo fue, pero con un desenlace muy cruel para los del Llano del Beal. Primero golpeó el Lorca Deportiva, que tuvo unos diez minutos de arreón que supo aprovechar a la perfección para abrir el marcador. Acevedo fue el autor del tanto que ponía a los de Sebas López por delante en el minuto cincuenta y siete de partido. Tras ese tanto, los blanquiazules se vinieron arriba y fueron en busca de ampliar la ventaja en el marcador, pero poco les duró ese buen tramo de fútbol.
Con el paso de los minutos la Minera iba creciendo y volcando el partido hacia la portería lorquina. Los cambios surgían efecto, y las piernas frescas de Petcoff, Paco Torres y Óscar Zorrilla fueron claves en el buen hacer de los visitantes durante el segundo tiempo.
Avisaba el conjunto cartagenero con dos zapatazos de Omar Perdomo que a punto estuvieron de acaba en gol. El primero se marchó alto y el segundo lo sacó con una gran parada el guardameta local. A la tercera ya no perdonó la Minera. Óscar Zorrilla, en el corazón del área, mandaba a la jaula su remate para hacer algo de justicia a lo que se estaba viendo sobre el terreno de juego y poner el empate en el electrónico.
Lejos de conformarse con ese empate, tras el tanto llegaron los mejores minutos de los cartageneros. El Lorca Deportiva daba a basto para achicar los intentos de los visitantes. Eso sí, no había manera. Kike Carrasco se topaba con los reflejos del cancerbero rival, Omar con la zaga local y a Ayala le separaron centímetros de que se zapatazo lejano acabara en el fondo de la portería.
El momento más cruel todavía estaba por llegar. Fue en el minuto ochenta y ocho, cuando Escobar se plantaba mano a mano ante Álex Lázaro y definía con una sutil vaselina. La zaga visitante despejaba el balón, pero el árbitro señalaba que había sobrepasado por completo la linea de gol. Jarro de agua congelada para un equipo qie se estaba mereciendo no sólo el empate, sino también la victoria.
La intensidad, el ritmo y el juego ofensivo no ceja en la Minera, que fue el equipo que más propuso sobre el verde del Artés Carrasco, pero los resultados ahora no están llegando. Las paradas, los golpes de suerte y los centímetros le niegan resultados positivos al cuadro del Llano del Beal, que no se vendrá abajo por este revés. Será turno de volver a levantarse, firmes y con más fuerza si cabe, para volver a dibujar sonrisas en la familia minerica.

