La Minera cae por 3-1 en un gran encuentro a pesar de todas las adversidades
No es el momento, no es la racha. Todo se torna en contra de la Deportiva Minera, cada semana algo nuevo que acaba dejando un fatal desenlace. El cuadro del Llano del Beal vuelve a competir con honores, con muchos honores, ante todo un UCAM Murcia CF, pero se vuelve a morir en la orilla. Los últimos minutos tumban a un equipo que había merecido mucho más durante todo el encuentro, incluso cuando el viento soplaba en contra tras una expulsión a la media hora de juego y un gol anulado al borde del descanso. El 3-1 final está muy lejos de satisfacer los méritos del cuadro de Checa a lo largo del encuentro.
El choque empezaba muy parejo, casi como una partida de ajedrez en la que ninguno de los dos contrincantes daba un movimiento en falso. Los dos primeros intentos llegaban por parte del conjunto cartagenero, con una internada de Javi Vera que acababa desbaratando la defensa local y un remate de Omar Perdomo que se perdía por centímetros.
Los de Checa poco a poco iban a más, ganando terreno en el partido conforme transcurrían los minutos, pero empezaron a llegar las complicaciones. A los veinte minutos se adelantaba el equipo universitario gracias a un remate de cabeza de Dani Aquino en un centro lateral desde la banda derecha. Apenas sin terminar de levantarse de este golpe, llegó otro directo al mentón. Ayala era expulsado con una tarjeta roja directa en una acción en la que las imágenes muestran que, claramente, primero toca balón.
Ni con todo esto la Minera tiró la toalla. Al revés. Sacó más carácter, coraje y determinación para seguir compitiendo como titanes. Tal fue la reacción que los últimos compases de la primera fueron los mejores, con una Minera metiendo en su propia área al UCAM Murcia CF. El premio a esa insistencia sí que llegó, en forma de gol. Omar Perdomo se sacaba un zapatazo espectacular directo a la escuadra de la portería murciana para poner el empate a dos minutos del descanso.
A pesar del poco tiempo que quedaba para el entretiempo, era suficiente para que los visitantes fueran a por el segundo. De hecho, llegó, pero el colegiado lo anuló. Rubén Mesa remataba en área pequeña un gran servicio de Omar Perdomo, pero los árbitros dictaminaban que había fuera de juego del delantero pacense. Un fuera de juego, cuanto menos, muy duduoso.
La segunda parte fue una prolongación de lo que se estaba viendo en el final del primer acto: los de Checa insistiendo en busca de un nuevo tanto y el cuadro local sujetando las embestidas de los rojillos. Las continuas subidas de Álex Macías por banda izquierda eran un puñal que acababan incidiendo en el corazón de la zaga azulona. Rubén Mesa también generó dolores de cabeza en el conjunto murciano, con continuos movimientos en el último tercio de campo y dos ocasiones que fueron desbaratadas, primero por la defensa y posteriormente por el guardameta rival.
Cuando toda parecía visto para sentencia con un empate como resultado final, la crueldad del fútbol se volvió a cebar con la Minera. Xente subía el 2-1 al marcador con un remate cruzado a menos de un minuto para el final del tiempo reglamentario. Dicho tanto obligaba a los del Llano del Beal a volcarse en busca de la heroica. Obligado a arriesgar y dejar espacios atrás, el UCAM Murcia aprovechó para sacar un contraataque y sentenciar el encuentro. Mizzian remataba a puerta vacía para poner el definitivo 3-1.
Todo se pone en contra y ante todo reacciona la Deportiva Minera. Por más que las cosas no salgan, por más que haya decisiones que no se entiendan, por más que los golpes sean duros, en este equipo no se rienda nadie. Insistir, insistir e insistir es la fórmula que devolverá los resultados positivos a una familia que está ahora más unida que nunca. Siempre lo ha estado y siempre lo estará, pase lo que pase.